Fuente: Diario Las Últimas Noticias

San Miguel, Pedro Aguirre Cerda, La Cisterna, Lo Espejo y San Ramón entrarán al sistema en 2025.

Luis Echeverría, director ejecutivo del Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Santa Rosa, está a cargo de liderar el traspaso de los colegios desde la administración municipal a la del nuevo sistema estatal, que parte a full el 1 de enero de 2025. La gestión abarcará las comunas de San Miguel, Pedro Aguirre Cerda, La Cisterna, Lo Espejo y San Ramón. Abarca 87 establecimientos y 20 mil estudiantes, además de 2.500 niños en los respectivos jardines infantiles.

Uno de los casos de traspaso al sistema SLEP es el experimentado en la Región de Atacama. Se instauró en 2021 y es considerado como una especie de plan piloto para lo que podría ocurrir con el resto de las regiones. El traspaso estuvo marcado por pérdida de clases para miles de estudiantes, paros de profesores, problemas de infraestructura en los colegios, entre otras situaciones.

¿Qué es lo más crítico que ha detectado en esta etapa de instalación?

“Lo primero es la situación de infraestructura. Nosotros ya estamos haciendo visitas en conjunto con arquitectos para adelantarnos en el diseño de proyectos, hay colegios que, por ejemplo, llevan más de diez años que no han sido pintados, que tienen problemas en sus techumbres y servicios higiénicos; otros que no cuentan con accesibilidad universal o el hecho que de 27 jardines infantiles que administraremos, solo tres de ellos cuentan con Reconocimiento Oficial (RO). Necesitamos resolver las situaciones de infraestructura más graves para luego ir proyectándonos en otras mejoras al corto, mediano y largo plazo dependiendo de la gravedad”.

¿Dónde han visto más problemas?

“Donde hemos detectado mayores problemas de infraestructura es en los colegios de San Ramón y Lo Espejo. Ese diagnóstico está siendo compartido y analizado junto a los equipos de las Direcciones de Educación Municipal (DEM) de esas comunas. De hecho, ellos nos ayudarán con la gestión de priorizar y diseñar proyectos de mejoramiento para los establecimientos, algunos de estos serán de gran envergadura e implican conservaciones totales y otros más específicos”.

Los problemas del SLEP de Atacama parecen ser señal de alerta con lo que puede ocurrir para el resto de Chile.

“He estado en contacto con otros directores ejecutivos, ya en régimen, incluso algunos que llevan más tiempo que Atacama, y que han avanzado mucho en infraestructura y en ámbitos del personal. Por ejemplo, hace poco estuvimos nosotros en el Servicio Local Gabriela Mistral, que está en la Región Metropolitana, y ellos han hecho inversiones gigantescas muy buenas, son escuelas a todo nivel. Acá en San Joaquín, La Granja y Macul”.

¿Pero es una señal de alerta?

“Obviamente han generado cierto temor, porque las comunidades al momento que uno va a conversar con ellas te preguntan ‘qué va a hacer usted como director para que no ocurra lo de Atacama’. Ahí nosotros estamos con un equipo de profesionales, trabajando fuertemente, haciendo los proyectos que tengamos que hacer, las líneas de mejoramiento que tenemos que hacer”.

¿Y puede generar algún tipo de preocupación que la Región de Atacama tuviera los peores puntajes en la PAES 2023?

“Cuando hay situaciones que dificultan la gestión, va a haber repercusiones en los resultados. Tenemos que ir, de alguna forma, a proyectar mejoramientos lo más inmediato posible, que esto, a su vez, traiga en un proceso de dos, tres años, mejoras en los resultados. He visto resultados de otros municipios, incluso otros Servicios Locales que también han logrado mejorar su resultado académico”.

¿Cree que es mejor publicar los resultados PAES para que los resultados sean de escrutinio público?

“Lo primero es que cuando hablemos de resultados educativos, tienen que ser planteados a nivel de las instituciones y a nivel general. Soy crítico de personalizar, porque finalmente no podemos culpar de un mal resultado directamente a un estudiante. Hay que ponerlos en su contexto. Estoy de acuerdo que los datos se utilicen para miradas más generales con respecto a lo que es el estado de la educación en Chile y, sobre todo, lo más importante, es tomar medidas, que evaluemos sobre qué vamos a hacer con esos resultados. Al particularizarlos, generamos más líneas de publicidad, que es un punto, pero la idea es que no tengamos los resultados solamente para hacer publicidad, que es un poco lo que hacían algunos preuniversitarios”.

FOTO: Richard Salgado/LUN